sábado, 22 de mayo de 2010

MICRORRELATOS

Se colocó bien la montura de las gafas sobre su nariz. Ahora, ahora lo veía todo claro. ¡Que ciega había estado!. Reclinó su cabeza en el respaldo del sillón y esperó, no sin cierta vergüenza, la llegada de la oscuridad del atardecer y con ella esa ceguera que le permitía seguir viviendo.

A las más de 60 mujeres que pierden la vida cada año como consecuencia de la violencia machista.

viernes, 21 de mayo de 2010


Aquí empiezo mi andadura en este terreno desconocido y lo hago con cierto pudor, pues siempre produce sonrojo hablar de lo que nos emociona, nos motiva e incluso nos provoca desagrado. Espero tener la constancia suficiente para dedicar a esta "HABITACIÓN" el tiempo y las ganas necesarias.